Alexander G. Zsvyagintsev,
El Senador de la Asociación Internacional de Fiscales
QUE SE BENEFICIARON DE LA GUERRA…
El 22 de junio de 1941 amenazó con convertirse en un día fatídico en la historia de la humanidad. Es difícil imaginar lo que habría sucedido a la humanidad sin los heroicos esfuerzos del ejército soviético, que derrotó a las hordas de Hitler.
Hitler usó todos los métodos viles en el ataque del 22 de junio de 1941.
La Segunda Guerra Mundial, iniciada en Europa por la Alemania nazi y en el Este por el Japón militarista, atrajo a más del 80% de la población mundial, más de 110 millones de personas de 61 estados.
Las pérdidas directas de la URSS ascendieron a unos 27 millones de personas. A las pérdidas humanas también hay que añadir que la tasa de natalidad después de la guerra en la URSS cayó en un 15,5%.
Desde junio de 1941 nuestros soldado, librando una guerra de liberación contra los agresores fascistas, lucharon contra 607 divisiones enemigas. Mientras que todos nuestros aliados juntos enfrentaron 3,5 veces menos – no más de 176 divisiones (y esto dados los combates en el norte de África y el sur de Italia). Las cifras de pérdidas también son incomparables.
¿CON QUIÉN PELEAMOS?
De hecho, toda la economía de los países que están sujetos al Tercer Reich realmente trabajó en contra de nuestro Estado. De hecho, luchamos contra el complejo militar-industrial y los recursos de toda Europa. Equipo, ropa, recursos naturales, provisiones y municiones fueron enviados a Hitler desde Francia, la República Checa, Bélgica, Suecia, los EE.UU. (!)
El 1 de julio de 1945, 47 divisiones inglesas y americanas sin una declaración de guerra tuvieron que asestar un golpe repentino a las tropas soviéticas.
Las ganancias de las corporaciones estadounidenses durante la guerra aumentaron de seis mil millones en 1940 a diez mil millones en 1944.
Las divisiónes de españoles, italianos, rumanos, franceses y otros países tuvieron su final sin gloria en los campos rusos.
Y las pérdidas irrecuperables del Ejército Rojo en la liberación de los países europeos ascendieron a alrededor de un millón de personas. Su sacrificio acercó el duro veredicto del Jicio de los pueblos de los criminales nazis.
LO QUE ESTABA PREPARADO PARA NUESTRO PUEBLO
El 9 de mayo de 1941, el jefe del ideólogo nazi Alfred Rosenberg presentó a Hitler el plan para el desmembramiento de la Unión Soviética. Y recibió la más alta aprobación del Führer.
El objetivo del plan era que Rusia no volviera a existir nunca más. En su lugar, se iban a crear muchas formaciones territoriales débiles, que, bajo la supervisión del Reich, eran constantemente hostiles entre sí debido al separatismo y el nacionalismo. Crimea como un territorio fértil, creía, para siempre ser incluido en el Reich.
¿DISPARAR Y AHORCAR O JUZGAR?
La idea de establecer un tribunal internacional no se formó y confirmó inmediatamente en la comunidad mundial. Inglaterra, los Estados Unidos, Francia y otros países compartían el ánimo de venganza y el deseo de tratar con los criminales nazis sin juicio.
Pero la dirección de la URSS insistió firmemente en la necesidad de un proceso judicial vocal y objetivo para hacer la lección de la historia aún más clara e instructiva.
Del 17 de julio al 2 de agosto de 1945, se celebró la Conferencia de Potsdam (Berlín) de los Jefes de Gobierno de la URSS, Gran Bretaña y los Estados Unidos. Allí, se hicieron obligaciones oficiales: juzgar legalmente a los perpetradores.
Pero todavía estaba demasiado lejos para implementar esta idea.
PUÑAL POR LA ESPALDA DE LOS ALIADOS
Los Juicios de Núremberg no podían tener lugar por una razón completamente diferente. El 22 de mayo de 1945, el Primer Ministro británico Winston Churchill tenía un plan para la Operación Impensable para atacar sin previo aviso a la Unión Soviética el 1 de julio de 1945.
La traicionera aventura fracasó, pero la tensión entre los vencedores persistió incluso después del 20 de noviembre, el comienzo del Juicios de Núremberg.
Además, los oficiales militares estadounidenses desarrollaron el proyecto de la Operación Pincher, el análogo a el plan britanico. Este plan estaba previsto en el caso de un agravamiento de la situación, una colisión de los EE.UU. con la Unión Soviética entre 1946 y 1949.
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No debe olvidarse
